¡AGUA¡
La alegría del niño
Ante el chorro de agua muy abundante
De la Fuente del Ejido
En Moradillo de Roa, Burgos
Que brota de un manantial
A los pies de la Ermita
Dedicada a la Virgen, su patrona
Que, por eso, pensaron los lugareños
Desde tiempos inmemoriales
Que “esta agua traía el espíritu de Dios
Y el amor de la Virgen”
Viniendo hombres, mujeres y niños
Con cántaras, cántaros y botijos
A llenarles de esta agua milagrosa
Desde los pueblos de Segovia
Valladolid y Burgos
Y hasta de Álava y Madrid
Porque creían que curaba
Los males del riñón y la gota.
El niño palmotea el agua
Juega con ella entre sus dedos
Como si se tratara
De frutos, plantas y flores
Que le ofrecen el abuelo o la abuela
Exprimiendo él su zumo o esencia
Apretándolas.
El juega y se ríe
Con los visos que hace la luz
Al reflejarse en ella.
El quiere coger el caño
Y tapar el agujero por donde sale el agua.
El quiere hacer navegar en el pilón
Donde antaño venía a abrevar el ganado
O las bestias de carga
Que traían las aguaderas
O serones que se ponían sobre las albardas
Y que va una a cada lado
Con objeto de llevar los barriles
O cántaros de agua
El barquito de papel
Que le ha hecho el abuelo
Y llora cuando le entra agua
Y se hunde.
Ahora, en este momento
Se ha acercado la bisabuela
Y nos comenta que esta agua
Es agua Viva con fuerza y sustancia
Y nos refiere unos refranes:
“Agua coge con harnero
Quien cree de ligero”
“Amor de niña agua en cestilla”
“Agua de Mayo
Pan para todo el año”
“Agua de san Juan quita vino y no da pan”
“Agua pasada no mueve molino”
“Algo tiene el agua cuando la bendicen”
“Después de los años mil
Corre el agua por do solía ir”
“Del agua mansa líbreme Dios
Que de la brava libráreme yo”
“Nadie diga de esta agua no beberé”
“Del agua vertida alguna cogida”
“Agua no enferma, ni embeoda ni adeuda”
Asombrados de lo que estábamos oyendo
El niño quiso beber agua en un vaso
Y casi se ahoga por dificultades al tragar
De poco momento.
Y, tan valiente él
Quiso meterse en el agua
Pero su madre no le dejó cogiéndole en brazos
Diciéndole a besos:
-Vamos a ver aquella luciérnaga
Menos luminosa que el cocuyo
Insecto muy luminoso de los trópicos
Y regar tu sabina
Con aguacibera
Además, mi niño lindo, tenemos que dejar
A las aves y los animales silvestres
Que vengan a beber
A este bello abrevadero.
-Daniel de Culla